Iglesia de San Michel de Cazavet |
En el mes de febrero del año 1726, tuvo lugar una peculiar doble ceremonia matrimonial en la pequeña iglesia de San Michel de Cazavet, situada en el extremo oriental de la Gascuña francesa, cerca de los Pirineos. Los hermanos Arnaud y Marie Antras desposaron a los hermanos Marie y André Bourdieu. Ambas parejas pronto tendrían descendencia. De Arnaud y Marie nacieron Martin, Pierre, Marguerite, André y, cuando Marie era ya una mujer de 42 años, el pequeño Bernard, que vino al mundo el 28 de enero de 1743 y fue bautizado ese mismo día.
A diferencia de sus primos, que, como todas las generaciones que les precedieron, se casaron, tuvieron hijos y murieron en Cazavet, los hijos de Arnaud y Marie abandonan pronto el pueblo y se pierde su rastro en los registros eclesiásticos. De todos menos del pequeño Bernard, de quien sabemos que en diciembre de 1784, siendo ya un hombre de 41 años, contrajo matrimonio en la localidad española de Lucena, Córdoba con una chica del lugar, Juana María Moreno.
No sabemos por dónde anduvo Bernard durante los años trascurridos desde que dejó su pequeño rincón de los Pirineos franceses hasta llegar a Lucena. Lo cierto es que parece haber echado raíces en su nueva tierra. En 1786 tiene un hijo con Juana María, al que bautizaron como Gregorio, que pasados los años también contraería matrimonio con una chica del lugar, Josefa Lozano, hija de un oficial del regimiento de los Dragones de Lusitania. La nieta de ambos, María Emilia Araceli Magdalena Hidalgo y Antrás, nacida en la luminosa ciudad de Córdoba en 1843, se casó con el madrileño José Morelli, mi tatarabuelo, y murió en Madrid a las 7 de la tarde del 30 de agosto de 1897 en el Hospital de la Princesa.
Y así termina el viaje emprendido por el valiente Bernard Antras cuando decidió dejar la pequeña y remota localidad de Cazavet. O a lo mejor no ha terminado, sino que continúa aquí, esta noche, en mi casa de Donostia, mientras escribo esta historia.
A diferencia de sus primos, que, como todas las generaciones que les precedieron, se casaron, tuvieron hijos y murieron en Cazavet, los hijos de Arnaud y Marie abandonan pronto el pueblo y se pierde su rastro en los registros eclesiásticos. De todos menos del pequeño Bernard, de quien sabemos que en diciembre de 1784, siendo ya un hombre de 41 años, contrajo matrimonio en la localidad española de Lucena, Córdoba con una chica del lugar, Juana María Moreno.
Puente romano y ciudad de Córdoba |
Y así termina el viaje emprendido por el valiente Bernard Antras cuando decidió dejar la pequeña y remota localidad de Cazavet. O a lo mejor no ha terminado, sino que continúa aquí, esta noche, en mi casa de Donostia, mientras escribo esta historia.
En aquella época los documentos permitían rastrear más o menos la vida de la gente, se requiere de tu esfuerzo para entroncar el pasado con la historia familiar más próxima al presente. Espero que lo hagas
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